Caminar 3,2 Kilométros al día mejora nuestra salud sexual.

Caminar 3,2  kilómetros al día puede mejorar la salud sexual de los hombres

 

Medicina Sexual

 

La salud sexual significa poder participar plenamente en la actividad sexual y disfrutar de la misma en pareja. Para los hombres, la sexualidad implica por un lado mantener la apetencia sexual, también conocido como libido y por otro, poder tener y mantener una erección, lo que se conoce como función eréctil. 

 

Cuando un hombre no puede desempeñarse sexualmente, puede estar experimentando impotencia o disfunción eréctil (DE). La impotencia es una incapacidad o deterioro de la capacidad para tener relaciones sexuales, que puede ser causada por problemas fisiológicos, aunque a menudo también hay factores emocionales y / o de salud mental en juego.

 

Hay muchas formas de tratar la impotencia masculina, incluidos los medicamentos recetados, la terapia con testosterona, las inyecciones en el pene y la cirugía. Pero también existe una forma natural y no invasiva de ayudar a controlar la disfunción eréctil: caminar. Es accesible, no cuesta nada y beneficia la salud y el bienestar en general junto con la salud sexual.

 

 



Factores de riesgo de disfunción eréctil

 

La disfunción eréctil es una condición frustrante que puede conducir a una actividad sexual insatisfactoria para las personas que la experimentan y sus parejas. Varios factores pueden causar disfunción eréctil, incluidos niveles bajos de testosterona, depresión o estrés, así como trastornos vasculares como arterias obstruidas e incluso complicaciones de la cirugía urológica. La disfunción eréctil también puede ser una señal de advertencia temprana de enfermedades sistémicas como la hipertensión, la diabetes, el síndrome metabólico, la arterioesclerosis e incluso de una enfermedad cardíaca.

 

Salud vascular y cardíaca

 

Existe un fuerte vínculo entre la disfunción eréctil y la salud vascular, y el ejercicio regular mejora el flujo sanguíneo para ayudar a mantener las arterias libres de obstrucciones. Un estudio publicado en el International Journal of Impotence Research determinó que el ejercicio regular, cuando se combina con otros cambios saludables en el estilo de vida, podría mejorar tanto la impotencia como la salud vascular.

 

Artículo recomendado:  Disfunción eréctil como predictor de enfermedad cardiovascular

 

"Las modificaciones en el estilo de vida, incluido el ejercicio físico regular, la pérdida de peso, los suplementos de omega - 3 y ácido fólico, la reducción de la ingesta de grasas y azúcar y la mejora del estado antioxidante ... deben integrarse en cualquier enfoque integral para maximizar la función eréctil, lo que resulta en un mayor éxito general y en la satisfacción del paciente, así como en una mejor salud vascular y longevidad ". (Tomado de: Lifestyle and metabolic approaches to maximizing erectile and vascular healthInt J Impot Res. 2012;24(2):61-68. doi:10.1038/ijir.2011.51)

 

 

El óxido nítrico (NO), que relaja los vasos sanguíneos y aumenta el flujo sanguíneo, es necesario para una erección. Se ha demostrado que la actividad física aumenta el óxido nítrico vascular,  y un programa de ejercicio y pérdida de peso también puede aumentar la producción de NO.

 

El ejercicio mantiene el flujo sanguíneo, lo que puede funcionar para prevenir o tratar la impotencia de la misma manera que funciona para prevenir las enfermedades cardíacas.

 

El ejercicio mantiene el flujo sanguíneo, lo que puede funcionar para prevenir o tratar la impotencia de la misma manera que funciona para prevenir las enfermedades cardíacas.

 

 

Actividad física

 

Un conocido estudio publicado en la revista Urology, encuestó a casi 600 hombres de entre 40 y 70 años a fines de la década de 1980 y luego nuevamente a fines de la década de 1990. Al comienzo del estudio, a los sujetos no se les había diagnosticado disfunción eréctil ni de cáncer de próstata.

 

Los hombres también gozaban de buena salud en general, ya que nunca habían sido tratados por diabetes o enfermedad cardíaca al comienzo del estudio. Desde el inicio del estudio hasta el seguimiento de nueve años, los investigadores examinaron si los hombres habían experimentado DE moderada o completa con un cuestionario autoadministrado que evaluaba su función sexual.

 

La innovadora investigación mostró que los sujetos que continuaron un programa de ejercicio regular o empezaron a hacer ejercicio durante la mediana edad redujeron su riesgo de desarrollar impotencia.

 

Sin embargo, los sujetos que tomaron otras medidas saludables durante la mediana edad no vieron un riesgo reducido. Aquellos que hicieron cambios como dejar de fumar, perder peso o dejar de beber no redujeron su riesgo de impotencia, según la investigación. Parecía que el ejercicio era la clave.

 

Obesidad

 

Los resultados del estudio indicaron que los hombres que eran obesos al inicio del estudio enfrentaban un mayor riesgo de disfunción eréctil, independientemente del peso perdido durante el seguimiento. El mayor riesgo de disfunción eréctil se encontraba entre los hombres que eran más sedentarios y realizaban la menor cantidad de actividad física.

 

Los investigadores concluyeron que "la actividad física puede reducir el riesgo de disfunción eréctil incluso si se inicia en la mediana edad. La adopción temprana de estilos de vida saludables puede ser el mejor enfoque para reducir la carga de la disfunción eréctil sobre la salud y el bienestar de los hombres mayores".

 

La investigación adicional ha continuado sugiriendo que la actividad física regular puede ayudar a controlar la impotencia y mantener la salud sexual masculina. En 2013, una revisión de la literatura médica existente indicó que la pérdida de peso puede "revertir la disfunción eréctil a través de otros mecanismos, a saber, disminución de la inflamación, aumento de los niveles séricos de testosterona y mejora del estado de ánimo y la autoestima".

 

Los autores señalaron que la evidencia apuntaba a varios factores que pueden contribuir a una mejora en la salud sexual masculina. Estos factores incluyen mayor ejercicio, pérdida de peso y salud.

 

Estos factores incluyeron mayor ejercicio, pérdida de peso e índice de masa corporal (IMC) saludable, y dejar de fumar.

 

Mientras tanto, una revisión de 2018 recomendó que los hombres físicamente inactivos realicen actividad física aeróbica de moderada a vigorosa durante 40 minutos cuatro veces por semana, y sugirió que seguir este régimen conduciría a mejoras en la disfunción eréctil en tan solo seis meses.8

 

Pautas de ejercicio cardiovascular para adultos mayores

 

Sabemos que el ejercicio regular es excelente para la salud en general,  y existe evidencia considerable que respalda que también es excelente para la salud sexual, sin importar su sexo. Una revisión de 2020 señala que el ejercicio regular puede mejorar la función sexual entre las mujeres perimenopáusicas y posmenopáusicas, por ejemplo.

 

Si nunca ha realizado ejercicio y tiene problemas para comenzar, tenga en cuenta que no tiene por qué realizar un ejercicio extenuante. De hecho, obtener una dosis diaria de ejercicio puede ser tan simple como una caminata rápida por el parque.

 

Caminar para mejorar la salud sexual

 

El Dr. Irwin Goldstein, destacado urólogo y director del Instituto de Medicina Sexual en San Diego, California, y su equipo de investigadores fueron los primeros en determinar que un estilo de vida sedentario aumenta el riesgo de que un hombre desarrolle impotencia.

 

La investigación publicada en la revista Urology indicó que los hombres que caminaban a paso ligero durante unos 3,2 kilometros, lo equivalente a quemar alrededor de 200 calorías, reducían significativamente el riesgo de disfunción eréctil.  Por su parte, los hombres que hacían ejercicio equivalente a quemas más de 200 calorías al día tenían el riesgo más bajo de desarrollar disfunción eréctil”.

 

Caminar solo unos 3,2 kilometros al día a un ritmo rápido, incluso si comienza en la mediana edad, tiene el potencial de mantener su salud sexual sin intervención médica, aunque los resultados dependerán de su estado actual de salud física y sexual.

 

Si tiene intención de empezar con este ejercicio, tenga en cuanta que

una caminata de unos 3,2 kilometros  debería llevarle entre 30 y 45 minutos a ritmo intermedio.

 

La clave es quemar un mínimo de 200 calorías al día y mantener un ritmo rápido. Como alternativa a caminar, también puede participar en otros ejercicios de bombeo cardíaco como trotar o entrenar en circuito.

 

El ciclismo, sin embargo, es controvertido. La evidencia es mixta sobre si contribuye a la disfunción eréctil debido a la restricción del flujo sanguíneo desde el asiento de la bicicleta, pero parece causar problemas como entumecimiento genital y problemas urinarios, particularmente si su bicicleta no le queda bien o si va en bicicleta más de tres horas al día por semana.

 

Bueno para todo

 

La disfunción eréctil es muy común entre los hombres, pero realizar una actividad física regular que le acelere el corazón puede ayudar a mejorar sus síntomas. Ya sea una caminata rápida de dos millas, un trote por el parque, una sesión de entrenamiento en circuito o un entrenamiento por intervalos, el ejercicio cardiovascular regular tiene el potencial de prevenir e incluso tratar la impotencia.

 

Si bien el ejercicio por sí solo puede no ser suficiente para todos, sigue siendo un buen principio. Además, Ud. obtendrá beneficios de un estilo de vida saludable que repercutirá en su salud física general.

 

 

Si le preocupa comenzar un programa de ejercicios o no está seguro de qué tipo de actividad física funcionará mejor junto con su tratamiento médico actual, consulte a su médico para obtener más consejos.

 

 

Bibliografía:

1.- Tsukiyama Y, Ito T, Nagaoka K, Eguchi E, Ogino K. Effects of exercise training on nitric oxide, blood pressure and antioxidant enzymesJ Clin Biochem Nutr. 2017;60(3):180-186. doi:10.3164/jcbn.16-108

2.- Derby CA, Mohr BA, Goldstein I, Feldman HA, Johannes CB, McKinlay JB. Modifiable risk factors and erectile dysfunction: can lifestyle changes modify risk?Urology. 2000;56(2):302-306. doi:10.1016/s0090-4295(00)00614-2

3.- Gerbild H, Larsen CM, Graugaard C, Areskoug Josefsson K. Physical activity to improve erectile function: a systematic review of intervention studiesSex Med. 2018;6(2):75-89. doi:10.1016/j.esxm.2018.02.001

 

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Dr. Susaníbar

Especialistas con Certificación Internacional.
Urología, Sexología y Medicina Sexual.

Tratamiento quirúrgico de vanguardia.
Especialistas en Cirugía Mínimamente Invasiva, Endourología y Robótica.

Especialización en Urología en Fundación Jiménez Díaz
Universiad Autónoma de Madrid.
Master en Sexología: Universidad Camilo José Cella.

Fellowships: Chile. México. Brasil. USA. España.

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