Cuando aparece sangre en la orina
El sangrado en la orina es un síntoma que impresiona mucho al paciente y a sus familiares, pues la presencia de sangre en la orina es relacionada casi siempre a una condición mortal. Felizmente la gran mayoría de las veces el sangrado en la orina, conocido médicamente como hematuria, no es consecuencia de una enfermedad grave. Conozca más al respecto sobre las causas de hematuria.
El dibujo nos muestra las posibles causas del sangrado de orina
La hematuria es el término médico del sangrado en orina
Un interesante artículo publicado por el Dr. Pietro Castro en sus Revisiones de Eemergencias, versa sobre uno de los síntomas frecuentes y más aparatosos en la urología: el sangrado en la orina.
Luego de una revisión de dicho texto, creemos conveniente compartir nuestra lectura con Ustedes.
Clases de hematuria: poniendo los puntos sobre las íes en la hematuria.
Antes de adentrarnos de lleno en las causas de hematuria, es necesario definir algunos términos que le serán de ayuda para comprender mejor el texto.
Clasificación observacional
La clasificación más simple del sangrado, se basa en la posibilidad de que el paciente vea o no la sangre en la orina, catalogando la hematuria en macroscóíca y microscópica.
Clasificación en relación con la micción
Otra clasificación es aquella que la diferencia dependiendo de su relación con la micción, sugiriendo
su posible origen:
Para precisar estas características es clásica la prueba de los tres vasos. Sin embargo, esta diferenciación sólo puede realizarse en las hematurias de escasa cuantía, y carece de valor cuando la pérdida hemática es importante.
Que puede causa el sangrado de orina?
Muchas son las causas de sangrado, y debemos agruparlas para su mejor comprensión
Sangrado por causa de tumores
La hematuria de los tumores, es causada por enfermedades renales, uroteliales, vesicales y prostáticas, y debe considerarse siempre dentro del diagnóstico diferencial en adultos mayores de 40 años.
Sangrado por tumores de la próstata
En el crecimiento prostático benigno (hipertrofia prostática), la hematuria es, al igual que la retención urinaria aguda o la infección, una complicación; y ello se debe a la congestión del proceso adenomatoso. Se trata de una hematuria terminal y se acompaña de la semiología propia del síndrome prostático (micción retrasada, pérdida de fuerza y disminución del calibre del chorro de orina, goteo terminal, estranguria, tenesmo vesical, polaquiuria, etc.).
Ya en el crecimiento prostático maligno, es decir en el cáncer de próstata, la hematuria acompaña a
un síndrome prostático atípico con dolor lumbar o sacro. El tacto renal pone de manifiesto una próstata firme, de consistencia pétrea e irregular y a menudo con nódulos de bordes imprecisos.
Sangrado de origen renal y de urotelio superior.
Se manifiestan como hematuria total, insidiosa y espontánea. Es de carácter intermitente y abundante, y se acompaña a menudo de coágulos alargados. En ocasiones, cuando es abundante, puede producir retención urinaria o dolor de tipo cólico uretral por coágulos.
Sangrado de vejiga.
Los tumores papilares de vejiga, benignos y malignos, cursan con hematuria generalmente abundante,
siempre total, en la que puede observarse el refuerzo terminal, y a veces inicial, que traduce la localización del tumor próximo al cuello vesical.
En los tumores primitivamente infiltran tes la hematuria se acompaña de signos de infección vesical. y la orina es turbia como consecuencia del proceso infeccioso que perpetúa la neoplasia.
Sangrado por cálculos renales
Los cálculos dan lugar por lo general hematurias discretas (microhematurias) que se acompañan de síntomas propios del cólico renouretral paroxístico. Un cólico renal por definición jamás causa una hematuria macroscópica y menos con coágulos.
Sangrado por infecciones
Las infecciones agudas, a cualquier nivel del aparato urinario, pueden originar hematuria de diferente
importancia que se acompaña de semiología infecciosa (fiebre y escalofríos de predominio vespertino, piuria y leucocituria), aunque en ocasiones ésta es poco relevante y la hematuria es el elemento dominante del cuadro clínico.
Sangrado por procesos congestivos y obstrucciones
La ptosis renal, la hidronefrosis y el riñón poliquístico originan hematurias que se asemejan a las de los procesos tumorales. Los procesos congestivos bajos se relacionan casi en su totalidad con causas prostáticas y se acompañan de los demás elementos del síndrome prostático.
Mención especial merecen las hematurias del embarazo, independientes de las pielonefritis. Son poco frecuentes, de origen vesical o renal y cesan, por lo general, al terminar la gestación, pero pueden plantear dificultades diagnósticas.
Sangrado por traumatismos y golpes fuertes
El l0 % de todos los traumatismos atendidos en un servicio de urgencias afectan al tracto genitourinario. Los renales son los más comunes, seguidos de los vesicales y uretrales.
Los traumatismos renales son una causa habitual de hematuria. Ésta constituye un elemento fundamental para pensar en una lesión renal como consecuencia de aquéllos. Los tres signos clásicos de presentación son los siguientes: hematuria, dolor en costado y contractura o masa palpable en dicha zona.
El traumatismo vesical o uretral se debe generalmente a fractura de los huesos de la pelvis. En ambos
casos existe dolor hipogástrico y puede haber hematuria y retención de orina.
Sangrado como consecuencia de la administración de medicinas y fármacos
Ciertos medicamentos pueden ocasionar hematuria. Así, los anticoagulantes. cuando no se realiza un estricto control del paciente, pueden ocasionarla como expresión de un estado de hipocoagulabilidad extrema (generalmente con valores de actividad de protrombina menor de 20 %). La ciclofosfamida puede producir una cistitis hemorrágica que obliga a suspender la administración del fármaco. Otros fármacos capaces de producir hematuria son: amitriptilina, ácido acetilsalicílico, clorpromacina, meticilina y sulfamidas.
Hematuria de las nefropatías
Generalmente es microscópica y se acompaña de datos clínicos y de laboratorio que permiten llegar
al diagnóstico de sospecha (hipertensión arterial, edemas, cilindruria, proteinuria, etc.)
Sangrado esencial o idiopático
Existen sangrados en los cuales la causa no puede ser precisada con un estudio exhaustivo. Su incidencia es menor de un 5 %.
Luego de una revisión de dicho texto, creemos conveniente compartir nuestra lectura con Ustedes.
Clases de hematuria: poniendo los puntos sobre las íes en la hematuria.
Antes de adentrarnos de lleno en las causas de hematuria, es necesario definir algunos términos que le serán de ayuda para comprender mejor el texto.
Clasificación observacional
La clasificación más simple del sangrado, se basa en la posibilidad de que el paciente vea o no la sangre en la orina, catalogando la hematuria en macroscóíca y microscópica.
- La Hematuria Microscópica es defininida como la presencia de más de 3 hematíes/campo en orina fresca.
- La Hematuria Macroscópica, se define cuando existen más de 5.000 hematíes/mi, en orina emitida recientemente y sin centrifugar.
Clasificación en relación con la micción
Otra clasificación es aquella que la diferencia dependiendo de su relación con la micción, sugiriendo
su posible origen:
- Hematuria inicial, es la que aparece al comienzo de la micción y sugiere un origen uretral.
- Hematuria total, es la que tiene lugar durante la micción e indica un origen intravesical o por encima de la vejiga.
- Hematuria terminal, se caracteriza por aparecer al final de la micción y sugiere una lesión en el cuello vesical o en la próstata.
Para precisar estas características es clásica la prueba de los tres vasos. Sin embargo, esta diferenciación sólo puede realizarse en las hematurias de escasa cuantía, y carece de valor cuando la pérdida hemática es importante.
Que puede causa el sangrado de orina?
Muchas son las causas de sangrado, y debemos agruparlas para su mejor comprensión
Sangrado por causa de tumores
La hematuria de los tumores, es causada por enfermedades renales, uroteliales, vesicales y prostáticas, y debe considerarse siempre dentro del diagnóstico diferencial en adultos mayores de 40 años.
Sangrado por tumores de la próstata
En el crecimiento prostático benigno (hipertrofia prostática), la hematuria es, al igual que la retención urinaria aguda o la infección, una complicación; y ello se debe a la congestión del proceso adenomatoso. Se trata de una hematuria terminal y se acompaña de la semiología propia del síndrome prostático (micción retrasada, pérdida de fuerza y disminución del calibre del chorro de orina, goteo terminal, estranguria, tenesmo vesical, polaquiuria, etc.).
Ya en el crecimiento prostático maligno, es decir en el cáncer de próstata, la hematuria acompaña a
un síndrome prostático atípico con dolor lumbar o sacro. El tacto renal pone de manifiesto una próstata firme, de consistencia pétrea e irregular y a menudo con nódulos de bordes imprecisos.
Sangrado de origen renal y de urotelio superior.
Se manifiestan como hematuria total, insidiosa y espontánea. Es de carácter intermitente y abundante, y se acompaña a menudo de coágulos alargados. En ocasiones, cuando es abundante, puede producir retención urinaria o dolor de tipo cólico uretral por coágulos.
Sangrado de vejiga.
Los tumores papilares de vejiga, benignos y malignos, cursan con hematuria generalmente abundante,
siempre total, en la que puede observarse el refuerzo terminal, y a veces inicial, que traduce la localización del tumor próximo al cuello vesical.
En los tumores primitivamente infiltran tes la hematuria se acompaña de signos de infección vesical. y la orina es turbia como consecuencia del proceso infeccioso que perpetúa la neoplasia.
Sangrado por cálculos renales
Los cálculos dan lugar por lo general hematurias discretas (microhematurias) que se acompañan de síntomas propios del cólico renouretral paroxístico. Un cólico renal por definición jamás causa una hematuria macroscópica y menos con coágulos.
Sangrado por infecciones
Las infecciones agudas, a cualquier nivel del aparato urinario, pueden originar hematuria de diferente
importancia que se acompaña de semiología infecciosa (fiebre y escalofríos de predominio vespertino, piuria y leucocituria), aunque en ocasiones ésta es poco relevante y la hematuria es el elemento dominante del cuadro clínico.
Sangrado por procesos congestivos y obstrucciones
La ptosis renal, la hidronefrosis y el riñón poliquístico originan hematurias que se asemejan a las de los procesos tumorales. Los procesos congestivos bajos se relacionan casi en su totalidad con causas prostáticas y se acompañan de los demás elementos del síndrome prostático.
Mención especial merecen las hematurias del embarazo, independientes de las pielonefritis. Son poco frecuentes, de origen vesical o renal y cesan, por lo general, al terminar la gestación, pero pueden plantear dificultades diagnósticas.
Sangrado por traumatismos y golpes fuertes
El l0 % de todos los traumatismos atendidos en un servicio de urgencias afectan al tracto genitourinario. Los renales son los más comunes, seguidos de los vesicales y uretrales.
Los traumatismos renales son una causa habitual de hematuria. Ésta constituye un elemento fundamental para pensar en una lesión renal como consecuencia de aquéllos. Los tres signos clásicos de presentación son los siguientes: hematuria, dolor en costado y contractura o masa palpable en dicha zona.
El traumatismo vesical o uretral se debe generalmente a fractura de los huesos de la pelvis. En ambos
casos existe dolor hipogástrico y puede haber hematuria y retención de orina.
Sangrado como consecuencia de la administración de medicinas y fármacos
Ciertos medicamentos pueden ocasionar hematuria. Así, los anticoagulantes. cuando no se realiza un estricto control del paciente, pueden ocasionarla como expresión de un estado de hipocoagulabilidad extrema (generalmente con valores de actividad de protrombina menor de 20 %). La ciclofosfamida puede producir una cistitis hemorrágica que obliga a suspender la administración del fármaco. Otros fármacos capaces de producir hematuria son: amitriptilina, ácido acetilsalicílico, clorpromacina, meticilina y sulfamidas.
Hematuria de las nefropatías
Generalmente es microscópica y se acompaña de datos clínicos y de laboratorio que permiten llegar
al diagnóstico de sospecha (hipertensión arterial, edemas, cilindruria, proteinuria, etc.)
Sangrado esencial o idiopático
Existen sangrados en los cuales la causa no puede ser precisada con un estudio exhaustivo. Su incidencia es menor de un 5 %.
Autor y Colaborador:
Dr. Luis Susaníbar. Urología Peruana.
Madrid Urología
Nuestro objetivo es compartir el conocimiento basados en literatura médica sólida y actualizada. Reconozca nuestros artículos especializados con las siglas MU (Madrid Urología)
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